Pan semiintegral con nueces

Creo que en el blog tendría que abrir una nueva categoría, la de mis panes de desayuno. Son los panes que elaboro más a menudo, diferentes recetas y fórmulas que preparo todas las semanas y que horneo en un molde rectangular de cristal de pyrex. 

¿Por qué los horneo siempre en molde? Sencillamente porque los rebano y los congelo en cuanto se enfrían. Es la mejor manera de conservarlos en su punto óptimo. Del congelador van dos rebanadas  directas al tostador cada mañana.  

Otra ventaja es que este tipo de panes solo necesitan 35 minutos de horneado, y al precio de la electricidad, es otro aspecto a tener en cuenta últimamente. 

Yo compro pan todas las semanas, trabajando a jornada completa (y más) me resulta imposible hornear todo el pan que consumimos en casa y, la verdad, es que en los hornos hay poca variedad de panes de molde integrales o semiintegrales, así que para mí es otro motivo para experimentar y probar nuevas recetas en un molde rectangular.

La que os comparto hoy es una de mis favoritas, pero también preparo muy a menudo el pan semiintegral con copos de avena y otras muchas que os iré mostrando más adelante.

PAN SEMIINTEGRAL CON NUECES

Ingredientes

• 200 g de harina de fuerza
• 250 g de harina de trigo integral 
• 320 g de agua
• 5 g de sal
• 10 g de miel (opcional)
  
• 1 sobre de levadura seca para pan
• 50 g nueces
  

Preparación

1. En un bol ponemos todos los ingredientes del pan excepto las nueces. Amasamos hasta conseguir una masa lisa y elástica. Si amasamos en kitchenaid lo haremos a velocidad 1, la masa estará lista cuando forme una bola alrededor del gancho. 
2. Agregamos las nueces a la masa y mezclamos hasta que estén incorporadas en la masa. 
   
3. Formamos una bola con la masa, la tapamos con un gorro de ducha y la dejamos reposar hasta que doble su tamaño.
4. Volcamos la masa sobre una superficie de trabajo ligeramente enharinada. La estiramos con la yema de los dedos para formar un rectángulo de unos 20 x 35 cm. Plegamos la masa como si fuera un tríptico. Luego la doblamos por la mitad. 
   
5. Colocamos la masa en un molde rectangular engrasado de 30 cm. 
6. Cubrimos la masa con un gorro de ducha y la dejamos reposar hasta que casi doble su tamaño. 
7. Horneamos el pan a 190 ºC, calor arriba y abajo, durante 35 minutos. 
8. Sacamos el pan del horno y desmoldamos enseguida. 
9. Enfriamos el pan sobre una rejilla.

Observaciones 

• Se puede sustituir una parte de la harina de trigo integral por harina de centeno integral. En este caso el pan quedará más denso pero también más sabroso. 
• Si no te gustan las nueces, puedes utilizar tu fruto seco favorito.
• Otra versión muy interesante de este pan es utilizar leche o bebida vegetal en lugar de agua. Se puede usar cualquier bebida vegetal (soja, avena, de frutos secos, etc.). 

 

Bizcocho de mantequilla

No se si existe una categoría de «bizcochos para mojar», pero si existiera este bizcocho tendría que formar parte de ella. Por supuesto, está muy rico solo, así sin nada como en la foto, pero mojadito en el café con leche de la mañana, ummm... ¡una perdición!  

BIZCOCHO DE MANTEQUILLA

Ingredientes

• 100 g de mantequilla
  
• 4 huevos L
• 75 g de azúcar
• Ralladura de medio limón
• 200 g de harina todo uso
• 8 g de levadura química
• Una pizca de sal
  

Preparación

1. Encamisamos un molde alargado de 20 cm y reservamos.  
2. Precalentamos el horno a 175 ºC, calor arriba y abajo. 
3. Derretimos la mantequilla en el microondas a potencia baja o utilizando el programa de descongelación. Reservamos. 
4. Con unas barillas, batimos los huevos con el azúcar y la ralladura de limón hasta que blanqueen y aumenten de tamaño (hasta que casi tripliquen su volumen).
5. Añadimos la harina tamizada con la levadura química y la sal y mezclamos bien. 
6. Incorporamos la mantequilla fundida y mezclamos hasta que se integre a la masa. 
7. Volcamos la mezcla en el molde que teníamos reservado. 
8. Horneamos a 175 ºC, calor arriba y abajo, durante 35 minutos. 
9. Sacamos del horno, desmoldamos y dejamos enfriar sobre una rejilla.
   

Observaciones

• Encamisar un molde es untarlo con mantequilla y espolvorearlo con harina. A mí no me gustan los espráis antiadherentes, pero también se pueden utilizar sin problemas. 
• Para aromatizar el bizcocho puedes utilizar ralladura de limón, de naranja, de mandarina, esencia de vainilla o tus especias favoritas (canela, nuez moscada, clavo, jengibre...).
  
• Si no tienes un molde alargado puedes hornear este bizcocho en un molde redondo o en cápsulas para magdalenas. Si utilizas la masa para magdalenas sigue las intrucciones de horneado de esta receta para que te salgan con un bonito copete: magdalenas en thermomix. 

Focaccia dulce

La focaccia no tiene que ser siempre salada. También te puedes dejar tentar por una focaccia dulce, una masa suave y esponjosa a medio camino entre un brioche y una coca de pan, con la ventaja de llevar menos azúcar, muchísima menos mantequilla y sin huevo. 

A mí me gusta con chocolate, pero admite casi de todo: mantequilla, mermelada, queso crema, cremas de frutos secos, crema inglesa... Es deliciosa para mojar y recién horneada se come sola. También se puede cortar por la mitad y rellenarla como si fuera un bocadillo gigante. ¿Necesitas más razones para probarla?

FOCACCIA DULCE

Ingredientes

• 8 g de levadura fresca para pan
• 15 g de miel
• 125 g de leche
• 160 g de harina de fuerza
• 90 g de harina de repostería
• 10 g de mantequilla
• 15 g de azúcar
• 1/2 cucharadita de sal
• Para la cobertura: una cuchadarada de aceita de oliva y 3-4 cucharaditas de azúcar
  

Preparación en thermomix

1. Ponemos en el vaso la levadura, la miel y 50 g de leche. Programamos 2 minutos, 37 ºC, velocidad 2. 
2. Añadimos 75 g de leche, la harina de fuerza, la harina de repostería, la mantequilla, el azúcar y la sal. Programamos 6 minutos, velocidad espiga (amasado). 
3. Retiramos la masa del vaso, formamos una bola y la volvemos a colocar en el vaso. Tapamos el vaso con un trapo de cocina y dejamos reposar hasta que la masa doble su volumen (60-90 minutos aproximadamente).
4. Forramos un bandeja de horno cuadrada de 20 cm con papel de horno. 
5. Colocamos la masa en el molde, vertemos aceite de oliva por encima y la estiramos con la yema de los dedos hasta que cubra toda la superficie.
6. Espolvoreamos el azúcar sobre la masa. 
7. Cubrimos la masa con un paño y la dejamos reposar hasta que doble su volumen. 
8. Precalentamos el horno a 200 ºC. 
9. Horneamos la focaccia a 200 ºC, calor arriba y abajo, durante 15 minutos. 
10. La sacamos del horno y la dejamos enfriar sobre una rejilla.
    

Preparación en amasadora

1. Calentamos 50 g de leche y la miel durante unos segundos en el microondas. Añadimos la levadura y removemos hasta que se disuelva.
   
2. Ponemos en el bol de la amasadora 75 g de leche, la harina de fuerza, la harina de repostería, la mantequilla, el azúcar, la sal y la levadura disuelta en la leche. Mezclamos a velocidad baja hasta que la masa forme una bola alrededor del gancho y se separe de las paredes.
   
3. Formamos una bola con la masa, la colocamos en un bol, la tapamos con un gorro de ducha y la dejamos reposar hasta que la masa doble su volumen (60-90 minutos aproximadamente).
4. Forramos un bandeja de horno cuadrada de 20 cm con papel de horno. 
5. Colocamos la masa en el molde, vertemos aceite de oliva por encima y la estiramos con la yema de los dedos hasta que cubra toda la superficie.
6. Espolvoreamos el azúcar sobre la masa. 
7. Cubrimos la masa con un paño y la dejamos reposar hasta que doble su volumen. 
8. Precalentamos el horno a 200 ºC. 
9. Horneamos la focaccia a 200 ºC, calor arriba y abajo, durante 15 minutos. 
10. La sacamos del horno y la dejamos enfriar sobre una rejilla.

Observaciones

• La levadura fresca se puede sustituir por media cucharadita de levadura seca para pan. 
• Podemos utilizar un molde redondo, de unos 23 cm de diámetro, en lugar de uno cuadrado. 
• Se pueden doblar las cantidades para focaccias más grandes. 
• Esta focaccia se puede cubrir con fruta (manzana, pera, albaricoques, melocotón, cerezas...).